En julio de 2024, el jefe Dadá Borari, responsable del programa Guardianes del Bosque de Treesistance, dirigió una sesión de formación vital con la comunidad Pajurá del pueblo Tupinambá. Situada a orillas del río Tapajós, en el municipio de Santarém. Los Tupinambá son conocidos por su fuerte resistencia y liderazgo en la protección de sus tierras y su cultura.
La formación reunió a más de 20 participantes, entre hombres y mujeres de todas las edades. Aprendieron técnicas esenciales de defensa territorial, creación de mapas y trabajo de campo con teléfonos móviles y cámaras GPS. Esta iniciativa, apoyada por miembros del Territorio Indígena de Maró, tenía por objeto dotar a la comunidad de herramientas para salvaguardar su territorio de las crecientes amenazas.
Una Historia de Lucha y Resistencia
Los Tupinambá del Bajo Tapajós habitan la Reserva Extractiva Tapajós-Arapiuns (Resex), creada en 1998 para contrarrestar las amenazas de las empresas madereras. Aproximadamente 20 de las 70 aldeas indígenas de la zona pertenecen a los Tupinambá. A pesar de su resistencia, se han enfrentado a retos históricos a la hora de afirmar su identidad y sus derechos territoriales. Las actividades misioneras y el devastador conflicto de Cabanagem, que acabó con hasta el 40% de la población de Grão Pará, casi borraron su presencia. Esto llevó a muchos a creer que los grupos indígenas de la región habían desaparecido.
La creación de la Resex permitió a los Tupinambá reivindicar su identidad y exigir la demarcación de sus tierras ancestrales como territorio indígena. Este reconocimiento transformaría la clasificación actual de la zona y les otorgaría un mayor control sobre sus tierras.
Amenazas actuales y la Lucha por el Reconocimiento
Sin embargo, los avances en el reconocimiento oficial de los territorios indígenas dentro de la Resex han sido lentos. Frustrados por los retrasos, los tupinambá comenzaron a autodemarcar sus tierras en 2017. Su objetivo es proteger 350.000 hectáreas de territorio tradicional. Se enfrentan a numerosos retos, entre ellos grandes proyectos de infraestructuras como la pavimentación de la carretera BR-163, la hidrovía Teles Pires-Tapajós y el ferrocarril Ferrogrão. Estos proyectos, concebidos para transportar mercancías, amenazan con perturbar sus tierras y su modo de vida.
La minería ilegal supone otro grave riesgo. En 2019, la deforestación ilegal en la región de Tapajós alcanzó niveles récord, con 10.500 hectáreas de bosque destruidas. La pandemia de Covid-19 empeoró la situación, dejando a las comunidades indígenas más vulnerables y reduciendo la supervisión estatal.
Construir un Futuro más Fuerte
Esta formación supone un importante paso adelante en el fortalecimiento de la capacidad de los Tupinambá para defender sus tierras. Con el apoyo de Treesistance y un agradecimiento especial a Nordeq Management, una empresa asesora danesa (que patrocinó la formación), la comunidad está construyendo una red de guardas forestales indígenas dedicados a proteger los bosques antiguos de esta región.
La determinación y el coraje de los Tupinambá son inspiradores. Sus esfuerzos por salvaguardar su cultura y su territorio contra viento y marea son un poderoso recordatorio de la importancia de la unidad y la autodeterminación. Juntos están construyendo un futuro mejor para su comunidad y las generaciones venideras.