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42,373 Hectares
Borari and Arapiuns
Territorio Indígena oficialmente reconocido
Forest Guardians operating since 2014
The concept of Curupira can be translated as “the protective spirit of the jungle”- although its meaning for the natives is much deeper, and enigmatic. As a sacred entity, its magical powers ultimately determine what ends up happening to those who get into the jungle. The mission that the Indigenous people have is to respect and protect the jungle and, in so doing, they respect and protect themselves.
The Borarí Indigenous group came to this remote territory, in which the Arapiun had been living for centuries after fleeing poverty from Alter do Chao (A predominantly Borarí land, about 30 kilometers to the west of Santarém, the capital city of the Lower Tapajós, in the Brazilian Pará).
They went along the Arapiuns River right up to its headwaters and, from there, they followed the course of the small Maró River, which gives the territory its name. The group is about 300 people spread over 3 villages: Novo Lugar, Cachoeira do Maró, and Sao José. But the territory is large: some 42.000 hectares of primary forest – that is, intact, never cut-down Amazonian forest.
Told through the voices of the Borarí people, Meet the Mother of the Forest and the guardian of all living beings inthe Amazon (A WaterBear production)
Para un observador inexperto, toda la selva Amazónica puede parecer igual, pero hay una diferencia fundamental entre una selva virgen como esta y una selva que ha sido explotada. En la primera fase de la explotación maderera, se talan los árboles que tienen las maderas tropicales más valiosas – según la cotización de los mercados internacionales.
La segunda fase consiste en la explotación de la madera remanente. La tercera y última fase es la eliminación total de la vegetación, generalmente para fines relacionados con la agricultura industrial o la ganadería extensiva. Aunque es posible que con el tiempo la selva pueda recuperar el espacio que fue destruido, la biodiversidad original se extingue para siempre y el carbono almacenado es liberado.
Desde que las incursiones de los madereros en su territorio se volvieron más agresivas hace algunos años, un grupo de hombres y mujeres elegidos por las aldeas, en colaboración con Treesistance, se organizaron como Guardianes de la Selva para vigilar el territorio. Ellos recorren regularmente el perímetro para monitorear, confrontar e impedir actividades ilegales.
Estos guardianes que crecieron aquí, conocen la selva palmo a palmo y dedican sus vidas a su defensa.
In 2017, they removed 6 illegal logging concessions and up until 2023 kept all illegal operations at bay. In 2023, two new logging companies attempted to invade their lands but have since been removed. Ensuring the territory is again free of deforestation and proving the effectiveness of the Guardian patrols.
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